Las duchas solares se han convertido en uno de los accesorios para piscina más demandados. En esta breve entrada os queremos dar algunas claves del porqué debes hacerte con una, si es que no la tienes ya…
El principio de funcionamiento de una ducha solar es muy sencillo, ya que utiliza la energía generada por los rayos del sol para calentar el agua previamente existente en un colector o depósito específico de la ducha.
En la actualidad, son muchos los diferentes modelos de ducha solar que nos podemos encontrar en el mercado, con múltiples diseños, precios, capacidad, etc.
Dicho esto, pasamos a mostraros algunas razones de porqué las duchas solares resultan tan interesantes:
- Practicidad y comodidad. ¿A quién no le fastidia cuando de repente decides ducharte y el agua que sale está excesivamente fría, o en ocasiones demasiado caliente? en una ducha solar podrás modular la temperatura del agua a tu gusto.
- Sostenibilidad. A diferencia de las duchas en las que contamos con doble toma de agua; una para fría y otra para caliente, con el consiguiente gasto energético para calentar el agua (gas, electricidad…), en una ducha solar no se produce ningún gasto energético extra para calentar el agua.
- Diseño. La apuesta de los fabricantes por este tipo de duchas es claro, lo que repercute directamente en una amplia oferta, con cada vez, diseños más novedosos e impactantes, llegando a convertirse por si solas, en otro atractivo más de la piscina. Diferentes formas, materiales, colores…
- Diversidad de tamaños para el depósito o colector. En función de tus necesidades, podrás optar por comprar una ducha solar con una mayor o menor capacidad de almacenaje de agua.
Y nada más, aquí tenéis algunas razones más para adquirir una fantástica ducha solar. Ya solo queda mojarse y disfrutar. Hasta la próxima…